Desde el gremio municipal hicieron un balance del año que finaliza.
Aseguraron que fue “muy positivo” y se refirieron al incremento de las asignaciones familiares, el pase a planta de los contratados y los 250 pesos que fueron incorporados al sueldo básico. También criticaron “el ninguneo” del intendente para con el sindicato.
Por último se refirieron al trabajo “en otros frentes, como lo fue la campaña para los beneficios de la Ley 19.640 lleguen a toda la población, con el tema del IPAUSS y los terrenos en Chacra XI para nuestros compañeros”.
Eduardo Cabral, integrante de la Comisión directiva de la Asociación Sindical de Obreros y Empleados Municipales (ASOEM) de Río Grande, realizó un balance del año que está finalizando y se refirió a los avances logrados en el sector.
Comenzó señalando que el año 2009 “fue muy positivo, en particular para esta nueva comisión porque salvo Gerónimo Ruiz y algún otro integrante, somos todos nuevos en esta actividad”, destacó el dirigente municipal.
En ese mismo sentido dijo que se hicieron “gremialistas de golpe y hay muchas enseñanzas que nos dejó este año, hemos crecido de golpe y en ese marco hubo buenas y malas experiencias”, señaló Cabral.
El representante de la ASOEM dijo que se propusieron, entre los principales objetivos para el año que está finalizando “recuperar la credibilidad de los compañeros, que estaban muy descreídos de los sindicatos”.
“Creemos que lo hemos logrado, sabemos que tenemos que mejorar en muchas cosas, que tenemos que cambiar algunas tácticas y otras cuestiones; pero esa es una tarea planteada para el próximo año”, se propuso.
Respecto del incremento salarial y en el monto que perciben los trabajadores municipales en concepto de asignaciones familiares, logrados en el transcurso de este año, Cabral recordó que “el intendente allá por diciembre de 2008 nos dijo, en la primera reunión que tuvimos, que él iba a dar aumento si quería y que iba a hacer lo que quería porque no le importaba lo que pensaban los demás y que el 70 por ciento de los trabajadores municipales éramos vagos.
Creo que eso nos dio un impulso mayor para tratar de cambiar esta situación”, advirtió.El dirigente de ASOEM se refirió a los avances de la ciudad en infraestructura y aseguró que “la mayor parte de esa obra la hicieron los empleados municipales”.
Reclamó “respeto y ser escuchados”, asegurando que “nuestra misión era esa, demostrar que los trabajadores municipales existimos y exigir respeto”.
Destacó como “un logro muy importante haber conseguido las asignaciones familiares más altas del país, gracias a este acuerdo que se transformó en un convenio colectivo de trabajo”.Mencionó la importancia de “la visión que tuvo nuestro secretario General, Gerónimo Ruiz, al llevar adelante este reclamo junto con la pelea para que los contratados pasen a planta permanente y el pase al básico de 250 de los 300 pesos obtenidos, porque si no hubiéramos puesto la carpa el intendente no estaba dispuesto a dar nada”, aseveró.
Sobre la postergación que tuvieron en la relación con el Ejecutivo, respecto de otros sectores gremiales, dijo que “no nos sorprende el ninguneo del intendente, porque todo el año fue así. Pero también tenemos nuestras armas, sabemos como defendernos y como hacernos respetar cuando es necesario.
La gente sabe que los logros fueron de nuestro sindicato, no somos títeres del intendente y no nos interesa ser muñecos de nadie para, por esa vía, hacer ingresar a nuestros parientes en la Municipalidad”.
Por último, Eduardo Cabral dijo que los empleados municipales tienen “muchas necesidades insatisfechas y por eso el año próximo estaremos ahí, batallando y en los lugares donde tengamos que estar, para mejorar la situación de los trabajadores”.
Concluyó el dirigente de ASOEM mencionando que también estuvieron “en otros frentes, como lo fue la campaña para los beneficios de la Ley 19.640 lleguen a toda la población, con el tema del IPAUSS, los terrenos en Chacra XI para nuestros compañeros; por eso decimos que fue un año positivo”, concluyó.
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